Sounding o el arte de meterse cosas por la polla

Sounding o el arte de meterse cosas por la polla

jueves, 22 de diciembre de 2016

De compras por el chino


¡Saludos morbosetes y amantes del sounding! En apenas unos días, concretamente pasado mañana, habremos alcanzado el día en que celebraremos en infinidad de países la Nochebuena y, un día más tarde, la jornada de Navidad. Como es tradición en muchos puntos del planeta, serán días de encuentro y entrega de regalos. Aprovechando la ocasión he querido traeros una entrada que tenía pendiente para, con ella, dejaros mi pequeño presente navideño de una forma muy curiosa: invitándoos a conseguir, incluso a crearos, vuestros propios regalos con que obsequiaros a vosotros mismos durante esta temporada.

Hace tiempo, durante unas charlas que mantuve con un par de seguidores y colaboradores del blog (concretamente con Javi, el sondero hetero de Barna, cuya "Sounding entrevista" fue publicada en abril de 2.015, y con Aeolos, ganador del Concurso 5º Aniversario del Blog), casualmente y por separado ambos amantes del sounding me comentaron las grandes posibilidades que una tienda de "chinos" ofrecía a la hora de encontrar material casero con el que poder practicar y disfrutar del sounding. No tardé en acudir en persona a una de estas tiendas, deambular por los pasillos del establecimiento, y empezar a toparme con infinidad de útiles que, por sus características, serían plenamente aptos para ser introducidos en la verga. Inclusive, algunos figuraban en diverso calibre, distintos tamaños y variados grosores. Entre ellos, múltiples objetos de los que ya hemos hablado  y disfrutado a lo largo de los cinco años del blog: sets de lápices, pinceles, agujas de ganchillo y crochet, etc. Los seguidores que me dieron la idea habían dado también con llaves de tipo Allen, glowsticks, removedores de cócteles e, incluso, Javi había llegado a adquirir en su día un servilletero, pues formaba parte de él una barra metálica acabada en esfera que él mismo había logrado introducir plenamente en su verga, alcanzando un placer descomunal.


Pero una vuelta por el "chino", además de ofrecerse como una oportunidad sencilla y barata para poder obtener juguetes con los que sondarnos la verga, puede ser también una fácil ocasión a través de la cual hacernos igualmente de otros artículos con los que poder crear otro tipo de juguete sexual y masturbatorio. Se trataría concretamente de un sucedáneo casero y manual del "fleshlight". Tras descubrir la información a través de la web pornoeducativo, sería tan sencillo como hacerte de un vaso de boca ancha, dos esponjas de baño y un guante de fregar. Como personalmente no me gusta ni recomiendo usar objetos de vidrio durante los juegos sexuales, preferí comprar un envase de plástico que supliera el vaso señalado. El montaje no tiene misterio alguno: en el envase introduces las dos esponjas, de forma vertical y paralela una con la otra. Entre ambas se inserta el guante, cuya muñequera serviría para, tras doblarla sobre la boca del envase, quedar fijado el mismo al juguete, sellando el interior. Listo para ser usado, sólo quedaría verter aceite en el interior del guante, o el lubricante que personalmente prefiera cada uno (en mi caso, me decanto por el lubricante sexual de base acuosa, fácil de limpiar).


Gracias a la visita al "chino", pude hacerme tanto con útiles para incrementar mi colección de objetos caseros con los que poder follarme el rabo, como con los "ingredientes" para poder hacerme de un básico "fleshlight". Ya sólo me quedaba estrenarlos y jugar con ellos. ¿Qué usaría primero? Difícil elección. Aunque siempre existe una alternativa que posiblemente a la mayoría de los amantes del sounding se le habría pasado por la cabeza: usar ambos tipos de juguetes a la vez. Como siempre es más ilustrativo una imagen que una explicación textual, pensé en filmarme haciendo uso de sendas gamas de juguetes, mostrándoos así su empleo. Desafortunadamente la batería de la cámara me jugó una mala pasada, por lo que la grabación se cortó en varios puntos, no logrando grabar entre otros detalles el montaje del masturbador casero. Sin embargo, sí quedó plasmado tanto la explicación inicial, como los pasos más importantes del juego y el desenlace final. Lo suficiente como para ofreceros nuevos conocimientos, mostraros el uso de un nuevo juguete, e invitaros a haceros de los materiales para, con ellos, poder disfrutar de nuestra verga tanto por fuera como por dentro. En definitiva, un regalo navideño del que podéis tomar nota, animándoos a ampliar vuestra colección de útiles sonderos, así como a crearos un juguete masturbatorio similar, concebido como un autorregalo  que termine convirtiéndose en un conjunto de compañeros de juegos que os traerán momentos de placer inolvidables. Os lo puedo asegurar ;) ¡Disfrutadlos!





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...